Mié. Abr 30th, 2025

¿De que color son las tortugas? Te lo contamos

¿Quién de nosotros no ha tenido una Tortuga o un Tortuguero al menos una vez al crecer? Probablemente nadie, ya que se trata de animales tan queridos como comercializados. ¿Se ha preguntado alguna vez qué son las tortugas? Intentemos arrojar algo de luz sobre el tema.

El orden Chelonia (tortugas terrestres y galápagos) incluye reptiles con una estructura protectora dorsal rígida llamada caparazón y una estructura ventral llamada osteodermo. Hay especies carnívoras y herbívoras, pero todas ponen sus huevos en entornos secos y protegidos y todas respiran aire, la mayoría, pero no, por ejemplo, las tortugas marinas también pueden retraer la cabeza y las extremidades hacia el interior del caparazón para protegerse.

Color tortuga marina

Durante el periodo de cortejo, los machos adoptan un ritual especial haciendo vibrar sus patas delanteras frente al hocico de las hembras. El periodo de apareamiento abarca todo el verano, y las hembras pueden «almacenar» el esperma del macho para utilizarlo en las siguientes nidadas.

Las hembras ponen de dos a treinta huevos elipsoidales (de 2,7-4,7 x 1,6-3,7 cm de tamaño) de una a seis veces al año, de abril a julio, en agujeros de 2-10 cm de profundidad y 10-20 cm de ancho. Los huevos eclosionan al cabo de 100-120 días. Las temperaturas de incubación conducen, si son inferiores a 27 °C, al nacimiento únicamente de machos, mientras que las temperaturas medias de 31 °C conducen al nacimiento únicamente de hembras.

Las tortugas jóvenes pueden alojarse en un acuaterrario bastante grande con una zona seca bien visible. Debe estar equipado con un calentador y una fuente de luz ultravioleta A y B en caso de falta de luz solar directa.

Si no es posible mantener tortugas adultas en el exterior, se recomienda tenerlas todo el año en un acuaterrario de 100x50x50 (1 ejemplar) o 120x60x60 (2 ejemplares), según su tamaño. Para individuos adultos, la capacidad del acuaterrario o estanque será mejor que no baje de 500 litros.

Vista de la tortuga de agua

Las tortugas tienen buena visión de los colores, pero aprecian mal el movimiento y las distancias. Las tortugas, en particular, se sienten atraídas por los alimentos rojos, naranjas o azules: «Ven estos colores mejor que los humanos y perciben mejor los rayos ultravioletas, mientras que nosotros percibimos mejor los amarillos y verdes», explica el Dr. Didier Boussarie, veterinario especializado en NAC (nuevos animales de compañía).

El caparazón se compone de una capa superior, o epidérmica, formada por un material córneo organizado en 54 escamas epidérmicas, y una capa profunda, ósea y termosensible, formada por 58 placas osteodérmicas.

Las tortugas tienen sensibilidad exteroceptiva, propioceptiva y nociceptiva. La nocicepción no está relacionada con la termosensibilidad, lo que explica por qué una tortuga puede quemarse sin sentir dolor», señala el experto.

La comunicación en las tortugas comprende una serie de medios con un componente táctil, olfativo, visual o auditivo: movimientos rituales de la cabeza, posturas, choques contra el caparazón, mordiscos, movimientos de las extremidades, vocalizaciones, feromonas procedentes de diversas secreciones glandulares.

Tortugas de colores

Las tortugas tienen buena visión de los colores, pero aprecian mal el movimiento y las distancias. Las tortugas, en particular, se sienten atraídas por los alimentos rojos, naranjas o azules: «Ven estos colores mejor que los humanos y perciben mejor los rayos ultravioletas, mientras que nosotros percibimos mejor los amarillos y verdes», explica el Dr. Didier Boussarie, veterinario especializado en NAC (nuevos animales de compañía).

El caparazón se compone de una capa superior, o epidérmica, formada por un material córneo organizado en 54 escamas epidérmicas, y una capa profunda, ósea y termosensible, formada por 58 placas osteodérmicas.

Las tortugas tienen sensibilidad exteroceptiva, propioceptiva y nociceptiva. La nocicepción no está relacionada con la termosensibilidad, lo que explica por qué una tortuga puede quemarse sin sentir dolor», señala el experto.

La comunicación en las tortugas comprende una serie de medios con un componente táctil, olfativo, visual o auditivo: movimientos rituales de la cabeza, posturas, choques contra el caparazón, mordiscos, movimientos de las extremidades, vocalizaciones, feromonas procedentes de diversas secreciones glandulares.

De qué color son las tortugas

Las tortugas pueden tener diferentes colores según la especie a la que pertenezcan. Algunas tortugas marinas, como la tortuga verde, tienen caparazones de color verde oliva o marrón. Este tono les permite camuflarse con las algas y plantas marinas, lo que les brinda protección contra los depredadores.

Otras especies de tortugas acuáticas, como la tortuga de orejas rojas, tienen caparazones de tonalidades más claras, como el amarillo o el marrón claro. Estos colores les ayudan a mezclarse con el fondo arenoso de los ríos y lagos donde habitan. Además, algunas tortugas acuáticas pueden presentar manchas o líneas en su caparazón, lo que les brinda un patrón único y distintivo.

En cuanto a las tortugas terrestres, suelen tener caparazones de colores más oscuros, como el marrón o el negro. Esto les permite camuflarse con el suelo y la vegetación de su entorno, protegiéndose de los depredadores. Algunas especies de tortugas terrestres también presentan manchas o dibujos en su caparazón, lo que les brinda un aspecto aún más llamativo.

Es importante destacar que el color de las tortugas no solo se encuentra en su caparazón, sino también en su piel. Algunas especies de tortugas tienen la piel de tonalidades más claras, como el amarillo o el naranja, mientras que otras tienen la piel de colores más oscuros, como el verde o el marrón. Esta variedad de colores en su piel también les permite camuflarse con su entorno y adaptarse a diferentes hábitats.

De qué color son los caparazones de las tortugas

Los caparazones de las tortugas pueden ser de una amplia variedad de colores. Dependiendo de la especie, pueden ser verdes, marrones, grises, amarillos e incluso negros. Estos colores pueden variar en intensidad y tonalidad, lo que da lugar a una gran diversidad de caparazones en el reino de las tortugas.

El color del caparazón de una tortuga también puede estar influenciado por su entorno y hábitat natural. Por ejemplo, las tortugas que viven en aguas tropicales y cálidas suelen tener caparazones más claros, como el verde o el amarillo, que les permiten camuflarse entre las plantas acuáticas y el fondo marino. Por otro lado, las tortugas que habitan en áreas rocosas o desérticas pueden tener caparazones más oscuros, como el marrón o el negro, que les ayudan a absorber el calor del sol.

Además de la especie y el entorno, la edad y el sexo de la tortuga también pueden influir en el color de su caparazón. Las tortugas jóvenes suelen tener colores más brillantes y vivos, mientras que a medida que envejecen, su caparazón puede volverse más opaco y desgastado. En cuanto al sexo, algunas especies de tortugas presentan dimorfismo sexual en el color de su caparazón, siendo los machos más coloridos y llamativos que las hembras.

Es importante destacar que el color del caparazón de una tortuga no determina su especie ni su salud. Existen muchas variaciones y combinaciones de colores dentro de cada especie, lo que hace que cada tortuga sea única. El caparazón también cumple una función de protección y no está directamente relacionado con la apariencia física de la tortuga.

En resumen, los caparazones de las tortugas pueden ser de diferentes colores, como verde, marrón, gris, amarillo o negro. Estos colores pueden variar según la especie, el entorno, la edad y el sexo de la tortuga. Sin embargo, es importante recordar que el color del caparazón no es un indicador de la especie ni de la salud de la tortuga, sino que forma parte de su singularidad y función de protección.